martes, 18 de julio de 2017

MARATÓN ULTRA SIERRA NEVADA 2017, The Walking Dead........

Y por fin me siento aquí a contaros como lo he vivido. Después de tantos entrenamientos, tantos días cansado por el trabajo y tener que buscar hueco para salir a correr, tantos entrenos a unas horas del día donde el calor y la humedad se apoderaban de mi cada día. Hoy por fin aquí estoy, con una medalla que dice que he terminado, que todo a salido a la perfección, que he sido y lo puedo contar finisher en un carrera con mucho prestigio y que se le añade a la dureza del relieve, la Ultra de Sierra Nevada. Lo he conseguido, he luchado en cada kilómetro incluso he pasado de casi llorar a pasármelo en grande disfrutando por todas esas sierras. En una carrera así se viven etapas diferentes, hubieron tramos que corría con una sonrisa en la cara, las bajadas unas las disfrutaba, y otras eran un tremendo calvario. Hice tramos en soledad, aún recuerdo las vistas desde allá arriba eran impresionantes. Nunca se debe de subestimar a la Montaña porque aunque parezca callada cuando habla te enseña lo que tiene guardado. hay que tenerle respeto. La semana empezaba bien hasta que en las noticias se decía que se aproximaba una ola de calor, empecé a tener algo de respeto a la carrera ya que iba hacer la ultra en unas condiciones extremas y añadiendo temperaturas de 43 grados, con lo cual ni lo pensé dos veces y logré cambiar de modalidad y gracias a la organización pude correr la Maratón, aún así había que tener respeto, mi salud era lo primero. Me presento el viernes en granada con la familia al completo, con una reserva de un apartamento justo en línea de meta, en Pradollano donde a la vez  se pasó un fin de semana al completo y de lujo. Una vez en Granada y tomando el dorsal y junto la bolsa del corredor, el calor de la calle me tirada de espaldas, 42 grados a la sombra alucinaba, empezaron los nervios, empezaba a dudar.... Una vez hospedados y relajados, el ambiente en Pradollano era muy tranquilo, se esperaba bastante publico para el sábado y domingo, la temperatura dada la altitud no era elevada y se podía respirar, pero yo seguía con mas nervios hasta que llegó la noche y en unas horas estaría en línea de salida. 6 a.m. me levanto tranquilamente ya que a las 7 tomaba un autobús que me llevaba a Quéntar donde estaba ubicada la salida, y allí , ya preparado, las sensaciones eran de correr con cabeza, no había nervios, parece ser que me los dejé allí arriba en la Montaña. Trabucazo y salida amigos , todo era cuesta abajo unos 500 metros de asfalto, tomaba posiciones, estaba a gusto, dos litros de agua en total que me servía hasta el primer avituallamiento. Giro a la izquierda y por un camino polvoriento entre alguna sombra se podía correr en condiciones.

 Empieza la primera subida , camino senda que poco a poco se iba tomando altura y casi llegando al primer avituallamiento. En tan pocos kilómetros observo que corredores ya cansados casi ni llegaban al primer avituallamiento, nos juntábamos de todas las modalidades ultra... trail... Maratón.. casi ni llegábamos con agua al primer punto, km. 11 avituallamiento, desencajados, y solo eran 11 kilómetros, faltaba la necesidad de beber, hidratarse, a eso que yo a lo mío, tomo algo de fruta, tengo hambre buena señal.. me hidrato, me refresco en unos grifos y para adelante ya que llevo unas dos horas de carrera y volver a subir. Empieza el calor, 38 grados muy secos y son las 11 de la mañana, subir y subir, tomamos un cortafuegos de casi un 35 de pendiente, todos a su ritmo, nadie habla, las subidas son lo mío lo reconozco, giro a la izquierdo tomando una senda y nos lleva a lo alto del calar donde las vistas eran impresionantes, empezamos a crestear me noto bien, aunque la sensación de sed no se me quitaba, y a ello que pienso y no dejo de trotar, para mí la carrera empieza ahora. Puede parecer raro, pero me encontré mejor de lo que esperaba y me sorprendió correr a un ritmo decente pero pensé que lo mejor era guardarme un cartucho en la recámara por si acaso.
 Volviendo a la carrera, después de una continua bajada de casi 6 kilómetros, llego a buena hora al siguiente avituallamiento, el de Guéjar Sierra, allí estaba situado el punto estratégico, o llegas bien o te retiras, yo llegué acalorado, casi sin agua, solo el chorro de una manguera que por allí de paso había solo con eso llegaba el suplicio. No tenía nada de hambre solo beber y bebe, empezó a pasarme por la cabeza el abandono, pero que tonterías dices me dijo un corredor de al lado mientras se comía una buena tajada de sandia... sal tirando leches que estás muy fresco chaval¡¡¡¡ pues a ello que le hago caso, como fruta, bebo, y ya una vez preparado salgo a trote con tiempo de carrera, con buena hora, solo me quedaba la mitad de carrera, tan solo 22 kilómetros de casi todo subida...... Tan solo 3 o 4 kilómetros fuera del pueblo y casi a 2000 metros de altitud, empezaba mi calvario, la temida subida por el barranco de las vívoras, apenas sombra, con un calor de morirse y encima casi solo, era cuestión de hablarse a uno mismo y tirar hacia arriba . Iba metiendo la gorra de vez en cuando en los riachuelos que empezaba haber por allí, eso me refrescaba, dosificando al minuto trago a trago para que me durase hasta lo alto, casi 9 km. de subida. Mi ritmo iba subiendo, me notaba con calor, pero tiraba hacia arriba, salgo de una zona boscosa y la senda , lo poco que quedaba de ella era toda escarpada y sin sombra , a pleno sol, 41 grados y por el Monte, para flipar¡¡¡ creo que estamos hechos de otra materia.... Salgo de la sombra, me cruzo con dos socorristas, novedad para mi, me preguntan si voy bien y a eso les contesto.. noooo si los que van mal son los de abajo, jaaa jaaa llego a un pequeño claro, donde me parece que creo que se acaba y salgo al asfalto. Llego a un avituallamiento, solo había agua, a eso que no me quejo y bebo, 5 minutos me quedo allí, en la sombra, preciosa sombra¡¡¡ tan solo me esperaban 4 km. de asfalto y de subida hasta el avituallamiento llamado botánico, donde me esperaban unas suculentas tajadas de sandia y fruta fresca..... Me quemaban las plantas de los pies, el asfalto ardía, quemado por el sol, que hasta ahora sigo con secuelas, el típico moreno de albañil, y alguna rozadura sin importancia. Recuerdo un momento con especial emotividad, fue el punto en el que vi Pradollano después de tantos kilómetros llevados, fue el punto en el que pensé que lo había conseguido, tan solo me quedaban 10 kilómetros " esto está ya hecho" y vaya si me equivocaba, llegando al avituallamiento.. ufff con que ganas lo tomaba , pillé una silla y beber, que manera de beber, fruta, me lo ofrecían todo, muy amables les dije pero tengo que salir, esto a casi 4 km. de meta, un saludo  y tomando una pequeña senda fuera del asfalto, tomo una pequeña subida y al monte otre vez, troto ando, y sigo trotando, así llegando a  pradollano donde la gente te aplaudía , era un ambientazo, últimas escaleras, alfombra azul¡¡ que pasada que entrada, emocionante amigos¡¡¡¡¡ Ahora si me lo creía, En fin, la subida no fue dura, sino durísima, pero es curioso como después de sentarme al sol y comerme un sandwich de nocilla se ven las cosas de otro color, y al bajar iba casi cantando, sabiendo de que la meta estaba cerca y que la paliza había merecido la pena. lo mejor de la carrera fue el trofeo, y no hablo de la medalla que me pusieron al cuello, y demás cosillas de la organización,  sino de un helado que me comí en meta como si llevara años sin probar ninguno jjaaa jaaa... hasta en esas cosas son originales los granaínos¡¡ Y poco más que añadir, mi familia en meta  fue emocionante. Quería hacer un apunte de material. Durante toda la carrera estuve con las mismas zapatillas, unas sportiva Akasha, compradas este mismo año y con menos de 100 kilómetros de trastadas. Tengo que decir que son las mejores zapatillas de trail que he tenido nunca. Ni una ampolla,  ni uñas rotas, nada de nada. Muchas gracias a todos vosotros por todo el apoyo, @cristianmorenofisioterapia @biofrutal @Centroopticocapri, mi enhorabuena a todos ellos, mi familia que es lo principal, felicidades a toda la organización y sobretodo a los voluntarios, sin ellos no es posible todo este evento un saludo grande y nos vemos en la próxima...
la familia al completo

Pradollano





FINISHER

todo un recuerdo


Aún tenía ganas de fiesta..


con un campeón..




inmortalizando el momento..